A partir de hoy la Sra Sonia no vendrá más a casa. Al parecer, ha enfermado por comer comida orgánica. Mamá dice que es imposible, que no hay nada más sano que la comida orgánica, que seguramente es una excusa para alguna otra cosa. El hecho es que la Sra Sonia regresó del doctor diciendo que las llagas de la boca se deben a un problema en los intestinos y que ya no puede cocinar porque sería algo muy contagioso. Cuando mamá escuchó la palabra "contagioso" decidió despedirla y claro, esta mañana despertó renegando cuando vio que el desayuno no estaba listo y que además tenía que limpiar.
Mamá suele lavar platos con un palito que tiene cerdas suficientes para sacar la grasa sin malograrse las manos. Sin embargo, cinco minutos luego de intentar quitar la grasa a una hornilla quemada, la vi aventando el palito y arañando con una esponja verde lo que se había quemado cuando la mantequilla saltó de la sartén. No contenta con eso, encontró un spray llamado "hornos y parrillas" que usó para llenar de espuma blanca el área quemada. Según el spray uno espera diez minutos y ya. Van quince y todavía. Veo que vuelve a echar. Debe haber optado por dejarlo remojando en la mitad del spray de espuma blanca, porque ahora la hornilla no se ve, solo veo un bulto escondido en espuma dentro del lavadero. Ten cuidado Gordo, es tóxico, no lo vayas a comer me dice, así que bajo del mueble para acompañarla al comedor. Y no, no para en el comedor, se saca los zapatos y se tira en el sillón de la sala, exhausta. Yo no he nacido para limpiar escucho ¿cuánto tiempo le tomará esta vez al service enviarme un reemplazo?
Me acomodo enroscado a su lado. Quizá un poco de calor la anime. Si alguien sabe qué comprar para quitar quemados, avísen... Algo me dice que veré más objetos quemados en estos días. La marca que usa es Sapolio. También se valen sugerencias de marca y tips alusivos al incidente.
Balthazar.
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